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En 2019, 267,258 inmigrantes fueron deportados de los Estados Unidos. Según el último año fiscal 2019 del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos.
Según el análisis de News Americas, eso es un ligero aumento de 256,085 en el año fiscal 2018. De ese número, la mayoría, o más de un cuarto de millón de los inmigrantes removidos, eran latinoamericanos.
La deportación de un padre tiene un impacto negativo significativo en sus hijos y familiares ciudadanos estadounidenses. Los niños que han perdido a uno de sus padres sufren daños psicológicos, se someten a cambios de comportamiento y experimentan graves deterioros en el rendimiento educativo y de salud. Los familiares que quedan atrás sufren múltiples consecuencias psicosociales. La separación de un niño de uno de sus padres debido a la deportación se asocia con dificultades económicas, inestabilidad de la vivienda e inseguridad alimentaria.
Si usted o un ser querido se ha visto afectado por este problema social, siga los pasos a continuación para prepararse utilizando los recursos que están disponibles para usted y su familia.
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